lunes, 6 de julio de 2009

AMIGOS Y “ENEMIGO INTIMO” DE SABINA

ANDRES CALAMARO:
El siguiente es uno de los sonetos que se publican en el libro Sabina Oral, Ciento volando de catorce, que Joaquín le dedica a Andrés Calamaro.
TODO A CIEN
Comprar el todo a cien de Calamaro
es mudarse al país de Gulliver,
qué capricho saberse un bicho raro,
cuántos nichos trepana su alfiler.
Cálices, brújulas, monomanía,
cañí lunfardo, cardo de jazmín,
no es un hijo bastardo de García,
dicen que dijo san Discepolín.
Le exigimos a Sting monday´s night fever*,
le ponemos a Prince algunos peros,
flacos esquizofrénicos for ever*.
La gloria eterna nos parece poco,
del fashion nos vengamos con boleros,
Andrés crece al revés y yo tampoco.
*Pronúnciese como se escribe.

FITO PAEZ
Esta es la famosa carta que Joaquín le envió a Fito cuando terminaron de grabar Enemigos Intimos.
QUERIDO RODOLFO PÁEZ:
En horas inoportunas
me han ido llegando algunas
noticias que se las traen.
Y, como vuelan y caen
sobre terreno abonado,
voy, señores del jurado,
a contestar enseguida.
Para vendarme la herida
cortando con el pasado.
Sabes bien que no intervine,
por respeto, en tu rodaje.
No quise hacerte chantaje,
ni soy crítico de cine.
Cuando me llamaste vine
a filmar en aquel cuarto
como un actor de reparto.
Pero ha llegado el momento
de decirte que lamento
estar harto de estar harto.
Ya es hora de terminar
esta historia interminable,
sin víctimas ni culpables;
pongamos punto y final,
y, volvamos, cada cual,
como gatos escaldados
a ordenar nuestro tejado;
concluyendo esta liga,
si no queremos que siga
lloviendo sobre mojado.
Te lo digo porque creo
que urge cortar por la sano
con la gira del verano
y el quilombo del video.
El rol del patito feo
no me va, te lo aseguro
y menos el de hombre duro
que a ti te cuesta tan poco
antes de volvernos locos
corrijamos el futuro.
He decidido que paso
la página de este enredo
perdiéndole miedo al miedo.
La gota que colma el vaso
no me la trago; hazme caso
y volvamos a lo nuestro,
cortemos este ambidiestro
nudo Gordiano de un tajo;
no soy tan tonto, carajo,
ni tu tan listo, maestro.
Te lo he dicho muchas veces
y no has querido escucharme,
sin pretender humillarme
me has humillado con creces;
a ti siempre te parece
que mis quejas son por vicio,
que maltrato nuestro oficio
siendo tal y como soy.
Déjame sacarte hoy
por última vez de quicio.
Basta de mirar atrás,
me voy con las emociones
que traen mis nuevas canciones;
¿discusiones? ni una más.
Tu Warner no ha de lograr
domesticar mi camino,
ni compartirá mi vino
gente que yo no decida.
Quien no se planta en la vida
no es dueño de su destino.
Aunque sea por una vez
tendrás que tomarme en serio,
no me hables de Ministerios,
presupuestos, BMG's,
no me vuelvas del revés
la decisión que he tomado,
que, por cierto, me ha costado,
sangre, lágrimas, sudor.
Conocerte fue un honor,
seguir juntos un pecado.
Lo más difícil ahí queda:
catorce hermosas canciones,
clip, reseñas, promociones,
mi voz de lija y tu seda;
con que sálvese quien pueda,
antes de que otras rencillas
conviertan en pesadillas
los sueños de la razón.
También se decir que no
si me buscan las cosquillas.
No filmaré más vídeos
ni discutiré contigo,
seguiré siendo tu amigo
sin urgencias ni careos.
De corazón te deseo
que lo entiendas noblemente
y le expliques a tu gente
que éste es un final feliz.
No puedo seguir así,
con la pluma entre los dientes.
Tengo que empezar de nuevo,
para escapar del abismo,
a decidir por mi mismo
sin contar con nadie; debo
atreverme, si me atrevo,
a demostrar lo que digo,
sin presiones ni testigos,
con aire nuevo en las pilas,
y la conciencia tranquila
de éste, tu íntimo enemigo.

JOAN MANUEL SERRAT:
En el disco YO, MI, ME, CONTIGO Joaquín canta esta canción dedicada a su amigo, Joan Manuel Serrat
MI PRIMO EL NANO
Tengo yo un primo que es todo un maestro
de lo mío, de lo tuyo, de lo nuestro;
un lujo para el alma y el oído,
un modo de vengarse del olvido.
Boca que mira,
vecino de Estambul, rey de Algeciras.
Viene del Poble Sec ese atorrante
universal, charnego y trashumante,
que saca, cuando menos te lo esperas,
palomas de la paz de su chistera.
Y, cuando canta,
le tiembla el corazón en la garganta.
Harto ya de estar harto de las fronteras
va pidiendo escaleras para subir
de tu falda a tu blusa, toca madera:
tendría que estar prohibido un fulano así.
Detrás está la gente que necesita
su música bendita más que comer
y el siglo que deshoja su margarita.
Yo, de joven, quisiera ser como él.
Tengo yo un primo que es primo de todos
cada cual a su forma y a su modo;
loco hidalgo con yelmo de Mambrino
que no teme ni a gigantes ni a molinos.
Y cuando gana
el Barça cree que hay Dios y es azulgrana.
Qué poca seriedad, qué mal ejemplo
para los mercaderes de los templos
ese alquimista de las emociones
que cura las heridas con canciones.
Mi primo El Nano,
que no me toca nada y es mi hermano.
Harto ya de estar harto de las fronteras
va pidiendo escaleras para subir
de tu falda a tu blusa, toca madera:
tendría que esta prohibido un fulano así.
Detrás esta la gente que necesita
su música bendita más que comer
y el siglo que deshoja su margarita.
Yo, de joven, quisiera ser como es
mi primo Joan Manuel.

GIRA DOS PAJAROS DE UN TIRO (www.jsabina.com)
Pocos conciertos pueden recibir el calificativo de “históricos” con mayor merecimiento que Dos pájaros de un tiro, de Joan Manuel Serrat y Joaquín Sabina. La reunión irrepetible de estos dos artistas emblemáticos, autores de canciones fundamentales de la historia de la música española de todos los tiempos, recorre en una gira de 75 conciertos España, México, Venezuela, Colombia, Perú, Chile, Uruguay y Argentina desde el 29 de junio al 18 de diciembre de 2007, en uno de los periplos más largos y exitosos que puedan darse. El 4 de diciembre se publica el álbum Dos pájaros de un tiro, que refleja de manera completa esta gira única en una grabación en directo.
Dos pájaros de un tiro se publica en dos formatos: 1) Caja especial en edición limitada con 2CD+DVD que ofrece las 35 canciones del concierto completo, el documental En el nido de los pájaros (un making of realizado durante el concierto en Barcelona) y un extenso libreto de 24 páginas, y 2) Edición en digipack con 1CD+DVD de más de una hora de música y 20 canciones, que también contiene el documental y el amplio libreto. Se trata del reflejo del concierto más importante de los realizados en los últimos tiempos, de una colección de canciones que han marcado generaciones, que vuelan por encima de tiempos y de modas y que permanecen en la memoria como parte de nuestra vida. El repertorio del concierto es una alternancia de las grandes canciones de los dos artistas. La mayoría están interpretadas al alimón. Otras en solitario. En algunas, Serrat canta a Sabina y Sabina a Serrat. En todas, uno se funde en el otro para ofrecer versiones nuevas e imaginativas. Este es el contenido de un álbum único, de indiscutible calado musical y poético, con el público convertido en protagonista coreando las canciones y que se publica para marcar una época.
La edición larga (2CD+DVD) de Dos pájaros de un tiro comienza como los conciertos de la gira: con una mezcla vibrante de Ocupen su localidad y Hoy puede ser un gran día, dos de las canciones más populares de Joaquín Sabina y Joan Manuel Serrat, que marca desde el principio el espíritu del álbum: sucesión de canciones de los dos mayores autores de la música española en un tándem vocal en el que Sabina asume a Serrat y Serrat a Sabina como si hubiesen compuesto juntos el repertorio. Una hermandad musical apoyada por una banda de lujo que proporciona una dinámica inédita, vital y preciosista con apoyo de los metales.
Aves de paso mantiene la tónica. Canción del repertorio Sabina que comparte cada estrofa con Serrat con la armónica de Antonio García de Diego dando color y bajando la tensión a tiempo medio, que se relaja aún más con Pueblo blanco, con el espíritu del noi como protagonista, como sucede en Algo personal, otra canción de Serrat que llega a ritmo de swing. A continuación le toca el turno al repertorio Sabina con Y sin embargo, que comienza el de Barcelona, continúa el de Úbeda, sigue con la participación de un público entregado y convertido en solista y se cierra en comunión musical.
No hago otra cosa que pensar en ti se convierte en canción-cómplice, con la letra de Serrat alterada en función de gags humorísticos en que las pullas recíprocas animan el cotarro. Quién me ha robado el mes de abril comienza con aires que recuerdan a la dylaniana Knockin’ on Heaven’s Door con un Sabina en plena forma como solista homenajeando al maestro de Duluth, igual que en Princesa, uno de sus momentos cumbre de un concierto que abunda en ellos. El dúo vuelve a aparecer en la emocionante versión de Contigo, canción de Joaquín Sabina a la que Joan Manuel Serrat aporta su particular hondura en un ambiente envolvente, sereno y sentimental.
Regresan las canciones de Serrat con Tu nombre me sabe a yerba, más mariachi que nunca y con las dos voces perfectamente engarzadas, mientras el maestro Ricardo Miralles muestra su sabiduría pianística en A la orilla de la chimenea, composición de Sabina de la que se adueña íntimamente y por completo el catalán, al tiempo que el jienense hace lo propio con la serratiana Señora, aligerándola con coros aflamencados. De nuevo Miralles introduce Aquellas pequeñas cosas que comienza ortodoxamente Serrat y Sabina transforma después en rumba. Son los momentos más acústicos y sureños del álbum que continúan con Ruido, donde el rock urbano sabinero se convierte en tango-rumba, y alcanzan el punto álgido con la versión de El muerto vivo popularizado por Peret, uno de los temas emblemáticos de la rumba catalana. El CD-1 de la caja se cierra con Es caprichoso el azar en una emocionante y ambiental versión de Joan Manuel Serrat.
El concierto sigue con Fa vint anys anys que tinc vint anys, uno de los temas emblemáticos de la primera época de Serrat (con el título ligeramente alterado) cantada en catalán, y Sabina toma el relevo cantando Poema de amor, otro clásico serratiano, esta vez con acompañamiento casi minimalista. El contraste llega con Pacto entre caballeros donde reaparece el Sabina más rockero, mientras en Noche de bodas se refleja el lado más popular y ranchero interpretado por los dos artistas. Sigue otro tema capital en un álbum repleto de canciones definitivas: Mediterráneo que Serrat se marca solo, como solo canta Sabina 19 días y 500 noches, otro clásico con el que se enfoca la parte final de un concierto en continuo ascenso.
Y llega Penélope transformado en medio tiempo y cantado a dúo, como Más de cien mentiras. Y continúan Fiesta, Pastillas para no soñar, Cantares, Y nos dieron las 10, todas cantadas al alimón antes de intentar en vano una despedida impedida por un público entregado e incondicional que, más que reclamar, exige bises tan íntimos como Paraules d’amor (cantada en catalán por Sabina y Serrat) y Lucía o tan potentes como La del pirata cojo, siempre con los dos artistas a dúo. El concierto se cierra con otras tres joyas como Calle Melancolía, Que se llama Soledad y Para la libertad, en las que Joan Manuel Serrat y Joaquín Sabina ofrecen el hermanamiento de sus voces en interpretaciones tan irrepetibles como magníficas.
Es el final de un concierto único del que sería injusto omitir los nombres de la magnífica banda que ha acompañado a Serrat y Sabina a lo largo de toda su gira. Ahí están Ricardo Miralles (piano), Pancho Varona (guitarra acústica), Antonio García de Diego (guitarras, teclados, armónica), José A. Romero (guitarras, acordeón), Víctor Merlo (bajo eléctrico, contrabajo), Pedro Barceló (batería), Patxi Urchegui (trompeta), José Miguel Pérez Sagaste (saxo), Roberto Bazán (trombón), Marcela Ferrari (coros) y Paqui Sánchez (coros). Músicos de lujo para un álbum que refleja una parte fundamental de la historia de la música española del último medio siglo a través de canciones imperecederas y en una unión artística que las recrea y las sitúa en una nueva dimensión. Es el regalo de Joan Manuel Serrat y Joaquín Sabina. Es Dos pájaros de un tiro.

ROBERTO FONTANARROSA:
Publicado el 12/08/07 en el diario Clarín. El les hizo el dibujo que identifica la actual gira de Joan Manuel Serrat y Joaquín Sabina por España y Latinoamérica. Ahora, Sabina le dedicó una poesía, como homenaje al amigo que ya no está y que tituló Zamba pal Negro Fontanarrosa (Rosarino Universal). Cosas que logra la amistad.
ZAMBA PAL NEGRO FONTANARROSA (ROSARINO UNIVERSAL)
Lo peor de la cosa
nostra es el chau
de Fontanarrosa
Primos al Palau
San Jordi del noi
sensa renegau.
Ni vengo ni voy
ni firmo recetas
de ayer para hoy,
porque, sin
Mendieta, Boogie
el aceitoso
parece un poeta
lírico y leproso
y su pobre viuda
una osa sin oso
ni fosa ¿quién duda,
Pereyra Inodoro,
de la bronca muda
del pibe del coro
que desface
entuertos sin
hallar tesoro?
¿Cómo que estás
muerto?
Mientras en Rosario
Central, che, Roberto,
un clon de Romario
te brinde un golcito
canalla y sicario
que muere por Fito,
por vos, por Olmedo,
por mi Juan Carlitos
Baglietto, me quedo
y me voy con Guevara,
compadrito en pedo,
cholo tarahumara,
tronco de un Quevedo
que escribe y dispara.

SUBCOMANDANTE MARCOS
A partir de esta carta, Joaquín Sabina compone “Como un dolor de muelas” para su disco Dímelo en la calle.
De: Subcomandante Insurgente Marcos.
CCRI-CG del Ejército Zapatista de Liberación Nacional.
Montañas del Sureste Mexicano, Chiapas.
México.
Don Sabina:
Yo sé que le parecerá extraño que le escriba, pero resulta que me duele la muela y, según acabo de leer, usted camina ahora por estas tierras que, mientras no acaben por venderlas también, siguen siendo mexicanas. Entonces pensé yo que, aprovechando que me duele la muela y que usted camina ahora bajo estos cielos, pudiera yo escribirle y saludarlo e invitarlo a echarse un "palomazo" con el Sup (a larga distancia, se entiende). ¿Qué dice usted? ¿Cómo? ¿Que qué tiene que ver el dolor de muelas con el "palomazo"? Bueno, tiene usted razón, debo explicarle entonces la muy extraña relación entre el dolor de muelas, el que usted camine por estas tierras, la larga distancia y una muchacha. No, no se sorprenda usted de que ahora haya aparecido una muchacha. Siempre aparece una, vos lo sabés Sabina.
Bien, resulta que cuando yo pasaba por esa etapa difícil en que uno descubre que ya no es más un niño y tampoco alcanza a ser un hombre (esa etapa, vos lo sabés Sabina, en que las féminas se transmutan de molestas a interesantes y hay que ver la de problemas que esto provoca), conocí a un viejo que, sin que se lo pidiera, decidió que tenía que darme un consejo sobre esos seres incomprensibles pero tan amables que eran, y son, las mujeres.
"Mira muchacho "me dijo", la vida de un hombre no es más que la búsqueda de una mujer. Fíjate que digo `una mujer y no `cualquier mujer. Y por `una mujer, muchacho, me estoy refiriendo a una de `única. El problema está en que el hombre siempre queda con la duda de si la mujer que encontró, si es que encuentra alguna, es esa `una mujer que estaba buscando. Yo ya estoy viejo y he descubierto una fórmula infalible para saber si la mujer que uno encontró es la `una mujer que estaba uno buscando..." (...) El viejo carraspeó y me confió: "Si tu le dices a una mujer que te duele una muela y ella, en lugar de mandarte al dentista o darte un analgésico, te abraza y deja que recuestes la mejilla en sus pechos, entonces, muchacho, esa mujer es la `una mujer que andabas buscando...".
Yo me quedé perplejo, pero como quiera tomé nota de la fórmula. A mí nunca se me había ocurrido que debía pasarme la vida buscando una mujer (...). A mí se me ocurrían cosas más concretas y factibles, como ser bombero, conquistar el mundo o construir un avión que se controlara solo con el pensamiento. Respecto a las mujeres, yo me tenía en muy alta estima y estaba más propenso a que esa "una mujer" me encontrara a mí, que a buscarla yo.
(...) A mí ni se me ocurrió que la fórmula estuviera mal. Así que achaqué mis primeros fracasos a la falta de autenticidad en mi dolor de muelas. Con clips y palillos, después de una paciente labor de meses, logré picarme dos muelas con tanto éxito que tuve que acompañar la estrategia con una fuerte dosis de antibióticos. Repetí la fórmula, ahora con la confianza de saberme auténtico, y los resultados siguieron siendo magros.
Así hubiera seguido adelante, acabando con mis muelas, si no es porque, ya adolescente, encontré a otro viejo que, cruel, me dijo: "Tu problema está en la cara. Más bien en tu nariz. A los feos, las muchachas no les hacen caso, a menos que sean cantantes". "¿Cantantes?" Bueno, esta nueva fórmula les daría reposo a mis muelas (que por lo demás ya estaban definitivamente destrozadas)... Claro que el problema entonces era saber qué se necesitaba para ser cantante (...). Después, escuchando canciones, me di cuenta de que el problema era mayor, ya que una cosa era ser "cantante" y otra más difícil era ser "cantautor" o "canta-autor" (vos lo sabés Sabina). Entonces hice trampa, es decir, escribí algunos poemas (o como se llamara lo que escribía) y dejaba siempre pendiente la música.
(...)Resulta que (vos lo sabés, Sabina) hay ahora una muchacha que está demasiado lejos y entonces pensé que usted, Don Sabina, podría echarme una mano y una tonadita (mire que no es lo mismo pero pudiera ser igual). Y usted podría echarme una mano si me permitiera tutearlo y, cómplice como ha sido antes sin saberlo, fingiera usted que nos conocemos desde hace mucho tiempo y que, por tanto, es perfectamente natural que usted reciba una carta del Sup redactada en los siguientes términos: "Sabina (sí, ya sé que te desconcierta este inicial e irreverente tuteo, pero tú compórtate como si tal cosa): He trabajado arduamente en los últimos días en la letra que me encargaste para tu nueva canción (Vamos, quita ya esa cara de espanto! Ya sé que no me has encargado ninguna letra para ninguna canción, pero sígueme la corriente para despistar al enemigo) pero ha sido inútil. No me sale nada original.
Así las cosas, busqué en el cofre del pirata y solo encontré un viejo y mohoso poema, que no es tan viejo y tal vez ni a poema llegue, que te puede servir si le das un poco de aliño. Es ideal para ponerle música y escalar con velocidad el "hit parade" internacional (no me preguntes si para arriba o para abajo), pero tú ya sabes que a nosotros los artistas (sigue fingiendo demencia, no denotes la menor sorpresa) no nos importa la fama (bueno, no mucho).
En este caso particular, a mí solo me interesa una muchacha que está demasiado lejos para que pueda yo musitarle al oído este poema y arrancarle así, vos lo sabés Sabina, una sonrisa o una lágrima (...). El poema dice, más o menos, así: "Como si llegaran a buen puerto/ mis ansias,/ como si hubiera donde/ hacerse fuerte,/ como si hubiera por fin/ destino para mis pasos,/ como si encontrara/ mi verdad primera,/ como traerse al hoy/ cada mañana,/ como un suspiro/ profundo y quedo,/ como un dolor de muelas/ aliviado,/ como lo imposible/ por fin hecho,/ como si alguien/ de veras me quisiera,/ como si, al fin,/ un buen poema me saliera./ Llegar a ti." La tonadita puede ir más o menos así: tara-tarara-tararira-etcétera, vos lo sabés Sabina. El título de la canción podría ser "Canción para una muchacha que está demasiado lejos", o "Un dolor de muelas para ella", o "Un dolor de muelas, Sabina, la larga distancia, una muchacha y el Sup". En fin, ya se te ocurrirá algo. El crédito puede ser "Letra: el Sup. Música: Joaquín Sabina", o "Letra y música: Joaquín Sabina (a petición del Sup)" o como quieras.
Vale. Salud y ojalá ella entienda.
El Sup." Esa podría ser la carta que usted recibiera y aceptara, Don Sabina.
Y todo esto viene a cuento porque estaba yo solo, con mi dolor de muela y leyendo que usted camina por estas tierras. Entonces pensaba yo que usted, tal vez, estaría de buen humor y magnánimo y que podría contarle yo la historia de los dolores de muelas, mi frustrada carrera como cantautor y una muchacha que está demasiado lejos (...).
Vale. Salud y ya sabe usted, si le sobran por ahí un analgésico o una tonadita, no dude en mandármelos. Ambas cosas se agradecen en este asfixiado pecho que le escribe...
Desde las montañas del sureste mexicano.
México, octubre de 1996
Subcomandante Insurgente Marcos.

1 comentario:

  1. Excelente. Gracias por subir los textos a la red. Escribí una reseña sobre el Ciento volando de catorce en mi blog. Esta es la dirección:
    http://lasfloresdelmarinero.blogspot.com/2010/07/ciento-volando-de-catorce-joaquin.html

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